El dibujo es en sí mismo un arte, siendo practicado con profusión por artistas de todas las épocas a lo largo de la historia, no sólo como estudio previo a la obra acabada sino como manifestación artística descriptiva o expresiva.
En este sentido cuenta con el concurso de una serie de normas y el análisis de conceptos como la composición, la entonación y la perspectiva.
En clase, estudiamos las etapas del dibujo en infantil.
La primera etapa es el garabateo, que se produce de los dos a los cuatro años. Dentro de esta etapa encontramos:
- Garabateo desordenado. Aparece a los dos años. Es un impulso primitivo. Movimiento por el movimiento.
- Garabateo controlado. Pasados seis meses del desorden. Mayor coordinación viso-manual, que le permite controlar mas sus movimientos.
- Garabateo con nombre. Alrededor de los tres años. Da nombre a lo que dibuja lo que muestra su intencionalidad simbólica, y su paso del pensamiento kinestético al imaginativo.
La siguiente etapa es la pre-esquemática:
Se produce de los cuatro a los seis años. Se caracteriza por una interpretación consciente de la forma. Mantiene una relación afectiva con la realidad. Existe un orden en las relaciones espaciales.
La siguiente etapa es la esquemática:
De los siete a los nueve años. Esta etapa se caracteriza por asegurar la simbolización y la representación. Aparece el esquema y el cuerpo aparece representado simbólicamente. El color se identifica con el objeto.
La última etapa es el hiperrealismo:
El desarrollo de la actividad creadora tiende a un realismo extremo. La actividad docente debe dedicarse a facilitar las herramientas para que los niños lo lleven a cabo.
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